Brainstorming Inverso: el poder de pensar al revés.

1. Define el problema.

Antes de empezar, es importante que puedas definir claramente el problema u objetivo en el que te quieras centrar.

2. Invierte el problema.

Ahora cambia el enfoque por completo. En vez de querer solucionar o mejorar la situación, piensa en todas las formas posibles de empeorarla. Este cambio hacia lo negativo te ayudará a encontrar soluciones creativas y poco convencionales.

3. Empeora el problema.

Es hora de sacar toda tu Creatividad. Haz una lista con todas las Ideas que se te ocurran para empeorar el problema. No hay reglas, no pongas límites a tu Creatividad, las Ideas más disparatadas y que parecen imposibles pueden ser muy útiles, las soluciones más innovadoras pueden surgir de estas Ideas poco convencionales.

4. Revisa las Ideas.

Revisa todas las Ideas y ordénalas por temas o áreas concretas. Esto te permitirá detectar patrones, identificar en qué sectores surgen los problemas y descubrir nuevas oportunidades de mejora.

5. Convierte ideas en soluciones.

Hay que volver al enfoque inicial, dando un giro a las Ideas negativas para convertirlas en posibles soluciones. Busca la forma de transformar la Idea negativa en formas de resolver el problema inicial, este paso te ayudará a crear nuevas opciones, que en un primer momento no hubieras considerado.

El Brainstorming Inverso es una herramienta muy útil para descubrir nuevas opciones que no te habías planteado y desarrollar soluciones fuera de lo común. Esta técnica te invita a pensar al revés para crear ideas únicas.

¡Impulsa tu Creatividad con esta Técnica Creativa y encuentra soluciones nunca antes vistas!

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