El experto en Inteligencia Artificial Ramón Sangüesa vino a Complot Escuela de Creatividad a desvelarnos hasta qué punto podemos dotar a las máquinas de pensamiento creativo.
¿Nos va a quitar la tecnología nuestros puestos de trabajo en un futuro? ¿Nos lo podría quitar ahora con tecnología que aún no conocemos? O lo que más nos aterra, ¿serían las máquinas capaces de pensar ideas mejor que nosotr_s?
Antes de volvernos loc_s deberíamos entender, por una parte, qué es la creatividad, y por otra, qué es la inteligencia artificial, para saber si de verdad podrían hacer match. Así que Ramón Sangüesa, experto en IA, comenzó la clase haciendo un brainstorming con estos dos conceptos.
Ramón definió la Creatividad como la capacidad artística de crear cosas nuevas, de ser original. Y el concepto de Inteligencia Artificial como un software creado para simular nuestra toma de decisiones de manera correcta y autónoma. Esta funciona con algoritmos y procesos formales muy específicos y por lo tanto, un sistema que empieza y acaba, consiguiendo un resultado preciso.
Así que parece que hay una contradicción. Por un lado, algo que es muy preciso, específico, y si no está formalizado no puede funcionar; y por otro, la capacidad libre y abierta de tomar decisiones sin ningún esquema para imaginar nuevos resultados.
Pero Salvador Dalí, por ejemplo, sí que tenía un método para la creatividad al que llamaba “Delirio Inducido”. Tenía que ver con un ejercicio de percepción e interpretación. Además, no olvidemos todos los libros que hay de Creatividad con métodos para hacernos pensar diferente.
Por lo tanto, hay métodos para desarrollar la Creatividad. Y si hay métodos, hay procesos que empiezan y acaban. Eso quiere decir, un algoritmo que podemos programar.
De esa idea salieron un montón de trabajos que Ramón nos enseñó donde se aplica ese principio de Inteligencia Artificial Creativa. Por ejemplo, una IA capaz de estructurar metáforas y crear poesía, u otra en la que llevan ya 20 años metiendo reglas de razonamiento para que realice representaciones artísticas de personas sin necesidad de ningún input. Además, ya hay generadores de textos literarios, de guiones de película, de música y cada vez más.
La IA está ganando terreno en el campo de la creatividad, pero no olvidemos que todo nace de un sistema cerrado que no puede escapar de ahí. Por eso, y para terminar, Ramón hizo hincapié en la importancia de algo llamado “El Bucle”:
“El potencial de la Creatividad en la IA no está en el propio programa, sino en que este nos genere nuevas ideas, ya sea aprendiendo del propio proceso o del resultado, pero que nos dé nuevos operadores para volver a meterlos en el generador y que la Creatividad vuele cada vez más lejos”.
Así que si tenías miedo de que la tecnología podría quitarte tu trabajo, en Complot Escuela de Creatividad Barcelona nos complace anunciarte que solo te dará más que pensar, más que aprender y más límites que romper.
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